viernes, 21 de marzo de 2008

Un hombre machacado y crucificado

Ayer miré la película de Mel Gibson: "La pasión de Cristo". La verdad, desde la primera vez que la vi me impactó mucho, pues las escenas sangrientas estaban- a mi parecer- más cercanas a una realidad imaginada por el director de dicha cinta de cómo hubiese sido la cruel represión brutal que recibió Jesús por parte de los romanos imperialistas asesinos-ya se parecen a unos vecinos del norte llamados "unidos" y que se consideran "cristianos".
Y es que cuando Cristo "necesitaba ser sacrificado" me acuerdo de lo que llamamos el "mal menor. En un pasaje de la película ofrecen a Barrabás o a Él para que uno de ellos sea el liberado. La gente elige al ladrón en vez que al Salvador.
¿Mal menor? Sí, porque tanto líderes politico-religiosos de la época como los funcionarios romanos ya olían la infección de una posible rebelión. Y muchos consideraban de sedicioso a Jesús por la prédicas revolucionarias que tenia cuando hablaba de que la religión judía era pura pantalla pero que dentro de ellos solo había huesos secos.
Tambien su protección a los derechos humanos y la revalorización de la mujer en Maria Magdalena-creo que por eso, si dicen que fue cierto, ella debió amarlo porque la salvo de una muerte segura- cuando los rabinos y la gente la iba a apredeear porque en las leyes mosaicas decía claramente esa indicación.
Volviendo al mal menor, tenía que morir para que más hermanos suyos no mueran, porque de alguna manera calmaría la sed de justicia que nacía desde el seno del campesino y proletariado judío. Es algo como hacen los prisioneros de guerra, prefieren morir en vez de traicionar a los compañeros. pero Él iba más allá, su sacrificio sería recordado por muchas generaciones, hasta ahora. Y hoy por hoy es considerado una verdad histórica y un mito.
Su mensaje de amor universal frente a un enemigo explotador, opresor y que justamente ese ingrediente haría que cambie hace que los dichos y hechos de Jesús sean muy cuestionados... es que era el hijo de Dios y para Él creo es que era normal amar hasta tu propio verdugo.
Las enseñanzas han sido causas de muchs divisiones, guerras pero también de reinvindicaciones sociales-como las enseñanzas del padre Gustavo Gutierrez en su Teología de la Liberación-
Su mensaje universal hace que sus palabras y las de la Biblia tengan una carga emotiva y social hasta ahora porque no sólo Cristo, sino profetas anteriores a Él denunciaban la opresión del rico, del imperio, del explotador. ´
Lo malo fue que sus palabras la volvieron signos de resignación, y creo que con justa razón Marx, Engels o Lenin la consideraban el opio de pueblo.
Nuestros hermanos nos llaman, el amor junto a un programa de reinvindicación social no pueden esperar; nuestros políticos entendieron lo último, pero les faltó lo primero...
Dios bendiga esta patria llena de luchadores, como el antiguo Israel de David o Cristo.

Tambien les recomiendo que lean las palabras del buen César Lévano en La Primera.

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